283. Dionisio Gutiérrez: When the future is not promise, it is threat

January 29, 2024
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   0:01 / 2:49   283. Dionisio Gutiérrez: Cuando el futuro no es promesa, es amenaza

Editorial del programa Razón de Estado número 283


 

Entender el mundo de hoy se ha convertido en una misión casi imposible. La pandemia nos dejó problemas de salud física y mental y también nos trajo una ola de autoritarismo desbordado, corrupción política y amenazas a nuestras libertades.

 

Vivimos un momento en el que estamos teniendo dificultades para pensar en un futuro que nos entusiasme, que nos ilusione; un futuro por el que merezca la pena luchar.

 

Esto no es cuestión de optimismo o pesimismo. La realidad ofrece unos hechos y unos datos, que, juntos, son las cartas que el destino presenta a las generaciones que hoy participamos en ésta, a pesar de todo, maravillosa creación.

 

Hasta principios de Siglo fuimos beneficiarios de una realidad que otros construyeron. El mundo próspero y desarrollado, al que tantos quieren emigrar, también fue pobre y atrasado, pero su éxito y sus victorias vinieron del abrazo que dieron a la libertad, al trabajo, al libre mercado, a la propiedad privada y a un sistema de certeza jurídica estable y de leyes iguales para todos. 

 

Aquel buen ciclo terminó, y hoy, ya no es posible enfrentar el presente y construir el futuro con el conocimiento y las herramientas de ayer; pero, cuidado, es menos posible pretender hacerlo con las ideas fracasadas y los antivalores que representan el socialismo, el populismo, el autoritarismo y demás ismos que solo han destruido riqueza, subyugado pueblos y empobrecido naciones.    

 

Los problemas de la democracia y los desafíos de la libertad se resuelven con más democracia y con más libertad, con división de poderes y Estado de derecho. Este es el único sistema que funciona.

 

La retórica populista promete soluciones rápidas a problemas complejos, pero miente, solo produce más problemas y sufrimiento. Vean Venezuela, pregúntense hasta dónde cayó Argentina; y piensen, al paso que va, cómo termina México.

 

Dicen que cuando el futuro no es promesa, es amenaza. Por eso, para entender el mundo de hoy, enfrentar sus desafíos y aprovechar las oportunidades, tenemos que soñar con el futuro que queremos, y empezar a construirlo. Como lo hicieron nuestros abuelos y bisabuelos en su día, y como lo debemos hacer hoy nosotros para nuestros nietos, abrazando los mismos valores que construyeron el mundo libre y desarrollado, los mismos a los que debemos sacar brillo para que estén a la altura de los tiempos; el primero de ellos, la Libertad.     

 

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