Editorial del programa Razón de Estado número 150
Hoy les presentaremos la edición número 150 de Razón de Estado, una de las tribunas de Fundación Libertad y Desarrollo.
Desde esta casa, pretendemos ser impulsores y protagonistas de la construcción de democracias liberales y republicanas para Guatemala, para Centroamérica, y por qué no, para América Latina.
Es cierto que, desde hace mucho tiempo ya, en nuestros países vivimos un ciclo en el que las instituciones de nuestras democracias; esas instituciones que las hacen republicanas, liberales y con Estado de Derecho, están muy lejos de la efectividad y la ejemplaridad.
Vivimos crisis y desafíos de enorme gravedad que debiéramos convertir en oportunidad. Para esto necesitamos élites, dirigentes y ciudadanos con sentido de Historia, de Estado y de nación. Necesitamos respuestas y soluciones a estos momentos de peligro e inflexión que el destino nos impuso.
Hoy, la realidad es que vivimos en naciones marcadas por el subdesarrollo político y la indiferencia. Síntomas de democracia moribunda y diagnóstico de pronóstico reservado para la libertad.
Cuando salgamos del oscuro túnel al que las malas políticas y las pandemias hacen laberinto, encontraremos un mundo hostil, empobrecido y presa fácil del populismo y la autocracia. Solo las naciones con pueblos valientes y élites responsables salvarán sus democracias.
Por eso, aunque asuste, la Política debe ser la profesión más digna y respetada; y el ciudadano valiente, presente y honesto su protagonista. De esto depende la preservación de las libertades civiles; y por ellas, la grandeza de las naciones.
La geografía nos permite identificar con facilidad en qué países se practican los fundamentos del liberalismo.
La libertad, no solo es justa e inteligente, sino además rentable. Y la geografía no miente. ¿Dónde preferiría vivir usted? ¿En Cuba, Venezuela y Nicaragua o en Uruguay, Chile y Costa Rica? ¿En Estados Unidos, Suiza y España o en Corea del Norte, Rusia o Somalia?
Tenemos dos misiones que siguen pendientes para nuestro subcontinente. La primera, construir Estados Democráticos de Derecho. Repúblicas eficaces fundadas en la libertad.
La segunda misión es diseñar y ejecutar modelos de desarrollo que ofrezcan oportunidad y esperanza a las naciones lastimadas por su historia y devastadas por una pandemia.
Con esta agenda pendiente, les presentamos la edición 150 de Razón de Estado con gran sentido de responsabilidad por América Latina y con nuestro compromiso para seguir difundiendo y defendiendo las ideas de la democracia y los valores de la República como únicos caminos para salvaguardar la libertad de los pueblos.
Desde Fundación Libertad y Desarrollo y desde esta tribuna que es Razón de Estado, les ofrecemos, con optimismo inteligente, convicción y compromiso, seguir luchando por los valores de la libertad que fundan el manifiesto liberal en que creemos y confiamos por su relevancia indiscutible, su efectividad y su vigencia.